Durante su adolescencia, Dylan se fue a vivir a San Diego, California, donde progresó rápidamente, haciendo skate todos los días en lugares como Poods Park, en Encinitas, California. No tardó en atraer la atención de la industria del skate gracias a sus constantes publicaciones en Instagram, en las que mostraba su rápida progresión. Tomándose su tiempo para hacer vídeos impresionantes y eligiendo cuidadosamente a sus sponsors, Dylan nos dejó claro que quería hacerse un nombre en el skateboarding.
Además de su talento en el skate, Dylan también demostró que también sabe ponerse detrás de la cámara, produciendo y grabando vídeos de skate con sus amigos en su propio canal de YouTube.
Sigue las dos versiones de Dylan @dylanjaeb & @notdylanjaeb en Instagram y lee su entrevista completa aquí.